Turno para los protagonistas de la noche, la banda de Lyon CELESTE. La atmósfera se tornó mágica, con luces que acompañaban a los integrantes de la formación, que compartieron sonrisas y miradas cómplices que reflejaban la complicidad que tienen entre ellos.

Comenzaron el show con las canciones “(A)”, “De tes yeux bleus perlés” y “Des torrents de coups” y la respuesta fue un estruendo de aplausos y gritos. Ese vínculo, ese diálogo entre artistas y asistentes, se sintió como el alma del concierto en todo momento.

Fue cuando los franceses decidieron como de costumbre encender sus encarnadas luces leds posadas sobre su cabeza y deleitarnos con el tema “Il a tant revé d’elles”. Una canción que invita a la reflexión con cada acorde. Los aplausos no se hicieron esperar, resonando en cada rincón de la sala.

Después de un pequeño respiró salieron a escena de nuevo para terminar la velada con “Comme des amants en reflet” y “Ces belles de reve aux verres embués”.

CELESTE no solo ofreció un concierto, entregó una experiencia a quienes tuvimos la suerte de estar allí.